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Los motores de persiana duran muchos años pero en ocasiones se estropean ya sea por el fallo de algún componente interno, (como por ejemplo el condensador), o por una mala instalación.
En el caso de que el motor pierda fuerza o deje de funcionar puede ser debido al fallo de algún componente interno y normalmente es preciso el cambio, pero en ocasiones podemos reparar el motor de persiana evitando el cambio, bajando costes y de paso ayudando al medio ambiente ahorrando recursos.
En el caso de una mala instalación podemos encontrarnos instalaciones eléctricas con cinta aislante en lugar de regletas de conexión, ejes que no han sido instalados a nivel y ocasionan el desplazamiento de lamas hacia los laterales que pueden encallar la persiana o cortar el cableado eléctrico, o instalaciones mal calculadas donde el motor no es el adecuado al peso de la persiana.
También podemos encontrar fallos en motores con mando a distancia, problemas de electrónica, desprogramación de los finales de carrera, o que al motor se le haya roto el freno.
En cualquier caso intentaremos realizar una buena reparación y en el caso de tener que cambiar el motor de persiana, tenemos recambios en nuestras unidades móviles para poder realizar casi cualquier trabajo in situ y terminar el servicio en menos de 24h/48h.
